Luego de un proceso de alrededor de 20 años, el jueves 23 el Senado dio media sanción al proyecto de Ley de Fomento de la Lectura y del Libro, entendiendo que ambos son instrumentos imprescindibles para la construcción de identidad, ciudadanía, democracia y desarrollo sostenible. Se abrieron, así, las puertas para el combate final contra la ignorancia en el Paraguay.
La gran mayoría de los paraguayos jóvenes no valoran y apenas conocen la historia de nuestro país, mucho menos la del continente y, por supuesto, ignoran casi por completo la del mundo. Este no es un problema menor.
En la prensa de hace algunos días se divulgó la noticia de que a lo largo de los últimos diez años fueron despilfarrados US$ 621 millones en ayudas del MAG (Ministerio de Agricultura y Ganadería) a los sectores campesinos, sin ningún efecto positivo, puesto que estos siguen padeciendo de una fuerte pobreza y continuos desarraigos.