El imponente templo de la parroquia de la Encarnación brilla con los colores patrios. El maravilloso espectáculo se puede ver esta noche en el centro de Asunción en la calle Eduardo Víctor Haedo, entre 14 de Mayo y 15 de Agosto.
Tupão La Encarnación pegua reloj nomba'apovei rive 50 ary pukukue, ko'ágã ohechuka jey aravo ha oñehendu jey campana.
Estuvo descompuesto durante cinco décadas, pero desde el martes vuelve a dar la hora con sus campanadas el reloj de la iglesia La Encarnación. El padre Ángel Arévalos cumplió un sueño con ayuda de feligreses y del técnico Alejandro Kubina. Los antiguos pobladores del barrio celebraron el hecho con emoción y nostalgia.
El histórico reloj del templo de La Encarnación ubicado encima del campanario volvió a funcionar tras 50 años de haber parado, y con él también volvió a repicar la campana. También habilitarán el Museo Papa Francisco.
La Capilla Musical de la iglesia La Encarnación propone hoy un concierto navideño, a partir de las 19:30, con la participación especial del organista Stefano Pavetti.
Minutos antes de la misa de sanación celebrada ayer en la iglesia de La Encarnación, el párroco Ángel Arévalo comentó que el martes por la mañana el arzobispo Edmundo Valenzuela le comunicó que las imágenes de San Ignacio de Loyola y San Francisco de Asís, parte del retablo de Koki Ruiz, se traerían al templo. Las imágenes realizadas íntegramente de semillas fueron bendecidas por el papa Francisco durante la misa en Ñu Guasu el domingo pasado. Según el padre Ángel, el arzobispo tiene un gran deseo de formar un museo de todas las cosas que utilizó el papa Francisco cuando visitó nuestro país, la silla, el cáliz, y todo lo demás”. El padre Ángel mencionó que “estas imágenes valoradas a nivel internacional permanecieron muchos días bajo la lluvia. Tengo miedo que esto germine, pasamos la noche con ventilador y estufa. Consultamos con el Dr. Líder Ayala Aguilera, profesor de la Facultad de Agronomía y experto en semillas, quien aconsejó un tratamiento de fumigación. Recordemos –dijo el sacerdote– que el retablo es alimento para los insectos, especialmente los que se forman dentro del poroto y fuera de las semillas. El templo es un nido de kupi’i, mencionó. Esperamos tres horas y luego con soplete se aplicó el barniz”.