El ministro de Industria, Gustavo Leite, declaró ayer que “no tiene la menor idea” de quién o quiénes son los responsables del intento de sobrefacturación de los US$ 5 millones, que estuvo a punto de concretarse en Petropar, en la compra de garrafas. ¿Cómo es posible que el ministro encargado de la cartera bajo cuyo égida está el ente pueda expresar un supuesto desconocimiento sobre lo que hacen funcionarios de menor rango?, es la pregunta.
El proyecto de ley presentado por el Gobierno sobre “Acuerdo Marco entre los gobiernos de Paraguay y Bolivia para la provisión de gas natural, gas licuado de petróleo y otros derivados” busca ceder a Bolivia –por 20 años– la soberanía nacional en la compra de gas y entregar a Petropar el monopolio del mercado local. Avanza a pasos agigantados y cuenta con aprobación de tres comisiones en el Senado.