Fueron 300 las familias damnificadas de la zona de Remansito que resultaron beneficiadas con una campaña impulsada por el Club Internacional de Tenis (CIT). El aporte incluyó kits con alimentos no perecederos, pelotas y agua mineral.
Unos 200 jóvenes de parroquias, scouts, voluntarios e integrantes de movimientos varios trabajan intensamente en el Seminario Metropolitano para la selección y empaquetado de los alimentos que serán entregados esta semana a los damnificados por la crecida del río Paraguay. Hasta ayer la Pastoral Social había recibido 110.000 kilos de víveres. También están confeccionando juguetes para la gran cantidad de niños.
Las inundaciones generan también millonarias pérdidas al sector productivo. Ganaderos y agricultores se han visto afectados por las crecidas de los ríos en diferentes puntos del país. Desde el Gobierno reconocen que no hay plan de contingencia.