“Cuando yo nací, mi pueblo estaba rodeado de selva, con un portón de entrada y otro de salida…”, relata el enigmático cuentacuentero paraguayo Marco Flecha, cautivando a un pequeño pero atento público reunido en un céntrico bar de la capital española.
Ella dejó su familia a los 16 -antes de terminar el colegio- porque, con los ingresos de la huerta, sus padres ya no la podían mantener. Tomó el primer trabajo que estuvo disponible y el único para el que ya había recibido la capacitación necesaria: el de empleada doméstica.
Edison Lanza, el recientemente electo relator especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), celebró la aprobación de la Ley de Acceso a la Información Pública en Paraguay. También se refirió a los desafíos que enfrenta la libertad de expresión en la región.
Con la negación de publicar la prueba completa administrada para el concurso de supervisores y coordinadores, sobre el cual pesa una serie de denuncias, queda demostrado que la transparencia en el Ministerio de Educación y Cultura (MEC) es de boca para afuera. Inicialmente, la excusa de Marta Lafuente para no divulgar el documento fue que “no todos somos especialistas”. También insistió en que el instrumento no tiene fallas técnicas, pero sin ofrecer el respaldo documental. ¿Espera la ministra que confiemos ciegamente en sus palabras sin poder ver los documentos con los cuales se toman las decisiones que afectan a la educación en el país? Al publicar 9 preguntas de las 50, el MEC alega “confidencialidad”. ¿Cómo puede ser confidencial un documento al que ya accedieron más de 350 personas?
La discapacidad y la pobreza están estrechamente vinculadas. Una herramienta poderosa para romper el ciclo es la educación inclusiva, afirmó la asesora de Unicef, Rosangela Berman-Bieler, quien refiere que en Paraguay persiste la exclusión de niños con discapacidad del sistema educativo.
Solo uno de cada cinco paraguayos logra comprender textos complejos, según resultados del Programa de Evaluación y Monitoreo de la Alfabetización (LAMP). Si bien el nivel de alfabetismo oficial es del 94%, el nivel de competencias reales es bajo.
El programa “Una Computadora por Niño” ha tenido resultados positivos, incluyendo el rendimiento escolar, según varias evaluaciones. La iniciativa, impulsada por Paraguay Educa desde el 2008, logró cambiar el paradigma de la educación, llegando a más de 9.000 niños en 35 instituciones educativas. Actualmente corre peligro por la falta de financiamiento.