6 de mayo de 2025
Desde los bañados hasta el corazón de la Iglesia, estos sacerdotes extranjeros y nacionales transformaron vidas y dejaron un legado de fe y solidaridad en Paraguay. El recordado Paí Oliva quien marcó un antes y un después en los bañados de la capital del país, de nacionalidad española, llegó a Paraguay en 1964; el padre Aldo Trento de nacionalidad italiana pisó suelo guaraní en 1999, creó la Clínica Divina Providencia que alberga a pacientes terminales. No se puede dejar de mencionar a Adalberto Martínez, quien trabajó en zonas vulnerables y es el primer Cardenal paraguayo.
El padre Francisco Oliva acusó al intendente de Asunción de dividir a los pobladores de los bañados en dos grupos, mediante “politiquerías”. Negó ser impulsor de violencia durante las marchas de bañadenses y habló incluso de infiltrados.