Desde los bañados hasta el corazón de la Iglesia, estos sacerdotes extranjeros y nacionales transformaron vidas y dejaron un legado de fe y solidaridad en Paraguay. El recordado Paí Oliva quien marcó un antes y un después en los bañados de la capital del país, de nacionalidad española, llegó a Paraguay en 1964; el padre Aldo Trento de nacionalidad italiana pisó suelo guaraní en 1999, creó la Clínica Divina Providencia que alberga a pacientes terminales. No se puede dejar de mencionar a Adalberto Martínez, quien trabajó en zonas vulnerables y es el primer Cardenal paraguayo.
Durante la misa celebrada por el Día del Trabajador se exhortó a que la clase obrera se una para reconquistar sus derechos y se ratificó la necesidad de que los dirigentes sindicales estén más comprometidos en la lucha por sus reivindicaciones.
Oñemotenonde jave misa ojegueromandu'ávo Mba'apohára Ára ojejerúre clase obrera ha'éva oreconquista haguã iderecho ha omoañete oikotevê umi tendota sindical oîvéva comprometido.
La inundación no será impedimento para la tradicional Noche de las Flores, celebración comunitaria de 15 años para 41 chicos del Bañado Sur, a realizarse este 4 de octubre en el Centro Comunitario, que recientemente fue acondicionado tras la crecida.
El padre Francisco Oliva acusó al intendente de Asunción de dividir a los pobladores de los bañados en dos grupos, mediante “politiquerías”. Negó ser impulsor de violencia durante las marchas de bañadenses y habló incluso de infiltrados.
El sacerdote Francisco De Paula Oliva, más conocido como Pa'i Oliva, ofició hoy una misa por el Día de los Trabajadores y pidió en la ocasión que los líderes sindicales más antiguos den lugar a los jóvenes para renovar la dirigencia.