Immanuel Kant, el filósofo alemán nacido hace 300 años pero cuyo pensamiento se sigue estudiando hasta nuestros días, será el eje de un ciclo de conferencias gratuitas que comenzará hoy en el Instituto Cultural Paraguayo Alemán (ICPA). El mismo reunirá a varios docentes de filosofía para celebrar y debatir su pensamiento.
La Ilustración fue una corriente filosófica y científica que revolucionó prácticamente todos los aspectos de la cultura a partir del siglo XVII. Los pensadores ilustrados tenían la esperanza de reivindicar a nuestra especie a través de los descubrimientos científicos, la industria tecnológica incipiente y la libertad intelectual, por mucho tiempo ninguneados, vilipendiados o censurados. La razón podía explicar ahora los fenómenos de la naturaleza; el mito y la religión por fin serían dejados de lado y un nuevo orden internacional se impondría para defender la paz. La superstición se combatiría duramente y la civilización podría alcanzar un alto grado de verdad científica, comprobada y criticada, que reemplazaría la verdad sagrada, propia de la tradición, la fe o el miedo de la Edad Antigua, Medieval y que todavía coqueteaba en la Edad Moderna.
Nacido en 1967, egresado de la École Normale Superieure, profesor por mucho tiempo en ella y desde hace unos años maître de conférences de la Université de París 1 - Panthéon Sorbonne, Quentin Meillassoux es una de las figuras mayores de la escena filosófica contemporánea. Lleva publicados tres libros: Después de la finitud (Après la finitude, 2006), prologado por Alain Badiou, que considera que Meillassoux abre una nueva vía en la historia del pensamiento, Le nombre et la sirène (El número y la sirena, 2011) y Métaphysique et fiction des mondes hors-science (Metafísica y ficción, 2013).
Aunque la estética en el sentido contemporáneo, es decir, no como un tema –la reflexión filosófica sobre el arte y la belleza se remonta en Occidente a la Antigüedad– sino como una disciplina autónoma dentro del quehacer filosófico, es de aparición tardía (se suele datar con Baumgarten, ya en 1742, cuando dicta sus lecciones de estética, ya en 1750, cuando publica su Aesthetica), yo diría que su existencia, de una manera tácita y larvada, es tan antigua al menos como las cavernas pintadas del Paleolítico superior.
MOSCÚ (AFP). Un ruso resultó herido cuando una discusión sobre los méritos del filósofo alemán Immanuel Kant (1724-1804) se volvió violenta, indicó ayer la policía de Rostov del Don, una ciudad del sudoeste de Rusia.
“El idiota se sorprende con todo lo que pasa desapercibido para las personas normales. El filósofo es exactamente así. Nadie elige ser un idiota, ni tampoco ser un filósofo”, expresa Montserrat Álvarez.