Los fiscales René Fernández y Liliana Alcaraz solicitaron al tribunal de sentencia que juzgará al acusado senador colorado cartista Víctor Bogado, por el caso de su “niñera de oro” -Gabriela Quintana Venialgo- adelantar el juicio oral que está previsto para junio de 2019 por cobro indebido de honorarios (como cómplice) y estafa, por temor a que el primero de los delitos citados prescriba.
A esta altura el senador colorado Víctor Bogado se erige como el más consentido de la justicia. Su proceso penal por estafa y cobro indebido de honorarios está cajoneado en la Corte. Prácticamente está blanqueado por enriquecimiento ilícito, y su supuesto testaferro está en la mira del Ministerio Público.
En setiembre de 2011, Víctor Bogado viajó a Aruba, la paradisiaca isla del Caribe, con la excusa de participar de una reunión del Parlatino como representante del Congreso paraguayo. Sin embargo, no se fue solo, pues lo acompañaron su esposa, sus hijas y hasta la niñera.
La justicia no sanciona al senador colorado Víctor Bogado, pese al evidente ejercicio abusivo del derecho en el proceso que se le sigue por estafa y cobro indebido de honorarios, en el caso conocido como “niñera de oro”. A más de dos años de la acusación, ni siquiera se resolvió si debe afrontar o no juicio oral.
A pesar de que el senador Víctor Bogado negara que Gabriela Quintana, quien percibía remuneraciones en la Cámara de Diputados e Itaipú Binacional, fuera la niñera de sus hijas, documentos revelan que la mujer acompañó a la familia del legislador en varios viajes al exterior.