Esta pandemia nos obligó a adaptarnos a innumerables situaciones incluso en los deportes. El pádel se consolidó como el “deporte del momento” por ser uno de las pocas disciplinas habilitadas por Salud. Hoy decenas de canchas son inauguradas tanto en Capital como en otros puntos del país.
Un grupo de dueños de canchas sintéticas propuso al Ministerio de Salud la habilitación de estos espacios con la aplicación de un protocolo estricto. Plantan que los partidos amateur sean con reserva por hora, además de la prohibición de vender bebidas alcohólicas para no propiciar las rondas de trago, o también llamado “tercer tiempo”.
La Municipalidad de Asunción no limpia ni controla la veintena de canchas que construyó a lo largo de la avenida Itá Ybaté (21 Proyectada), que abarca parte de los barrios Obrero y Tacumbú.
¿Alguna vez te pusiste a pensar por qué los partidos de nuestro balompié no tienen tanto público? El precio de las entradas, el peligro constante al estar cerca de las barras bravas y el bajo nivel de fútbol de muchos partidos son algunos de los factores.
Lejos, muy lejos quedó aquella época en la que los estadios de fútbol se llenaban de familias enteras. Qué increíble resulta que hace solo dos décadas los “proyectiles” más peligrosos que se usaban en las canchas eran las naranjas que se vendían adentro. A lo sumo, algún inadaptado era castigado con una “lluvia” de orín. Ahora, las barras bravas usan hasta armas de fuego en las gradas.
La Policía asegura que con base en videos de circuito cerrado pudieron identificar a dos integrantes -uno de ellos con arma de fuego- de la barra de Olimpia que iniciaron la gresca el pasado domingo. Ninguno está entre los detenidos e imputados.