Uno de los fusiles incautados del poder de los tres supuestos sicarios detenidos en el barrio Santa María fue utilizado para asesinar al niño Gabriel (5), en un ataque perpetrado el miércoles último en la capital, confirmó la Policía. Los agentes sospechan que esta red criminal tendría más miembros y arsenales diseminados en Asunción, con la supuesta intención de perpetrar un atraco en el aeropuerto Silvio Pettirossi.
Las facciones criminales lideradas por el recluido Jarvis Chimenes Pavão y los fugitivos Clemencio “Gringo” González y Ronaldo Rodrigo Benites, alias Galán, serían las responsables de la sangrienta guerra que el miércoles último se cobró incluso la vida de un niño de cinco años, en un atentado en Asunción.
Willer Lescano relató que, finalmente, Willian Giménez Bernal no habría muerto a consecuencia de los disparos de los sicarios, sino que, al ver a su hijo Gabriel muerto, él mismo se pegó un tiro con su arma.
La Policía logró encontrar un celular a dos cuadras del lugar del atentado de ayer. El aparato podría pertenecer a uno de los sicarios, informó el comisario Walter Vázquez, jefe de Policía del Área Metropolitana.
Un “secretario” del capo recluido Jarvis Chimenes Pavão fue asesinado ayer en un feroz atentado a tiros ocurrido en Asunción y en el que también murió su pequeño hijo de cinco años. El vehículo acribillado figura a nombre de la empresa Grupo Cristo Rey SA de Pedro Juan Caballero, que ya sufrió otros seis ataques este año. La casa de las víctimas fue allanada hace dos meses en busca de miembros del PCC.
El Ministerio del Interior emitió ayer un comunicado con relación al brutal atentado y, sugestivamente, reveló que “se tiene información concreta de que Willian Giménez Bernal, oriundo de Pedro Juan Caballero y conductor del vehículo atacado, se trasladaba con frecuencia a la capital para visitar a Jarvis Chimenes Pavão en la Agrupación Especializada”.