En IPS Ingavi los aportantes de la previsional denuncian persecución y malos tratos en medio de intentos de desalojo. La falta de empatía proviene generalmente de los guardias, que hasta amenazan a los familiares, acusan. Reclaman también la frecuente falta de algunos fármacos.
Funcionarios de la Clínica Periférica 12 de Junio del Instituto de Previsión Social (IPS) se manifestaron ayer por lo que llaman “sucesivas persecuciones” que sufren de parte de la directora médica, doctora Mirian Fariña. Aseguran que la profesional malversa la caja chica y vendió combustible destinado a vehículos de la institución.
Autoridades del hospital geriátrico “Doctor Gerardo Buongermini” del IPS anunciaron que investigarán la denuncia por malos tratos y supuesta falta de insumos, que fue realizada por familiares de una asegurada internada.
Una familia denunció que fue maltratada por médicos del hospital del IPS cuando un menor fue operado el pasado 25 de febrero.