El ministro de Defensa, Diógenes Martínez, declaró ayer que está en contra de que se derogue la Ley de Defensa Nacional, que habilita al Poder Ejecutivo a disponer de la utilización de las Fuerzas Armadas en cuestiones de seguridad interna en cualquier parte del país.
El ministro del Interior, Francisco De Vargas, aseguró que el trabajo entre agentes policiales y militares en la zona norte será coordinado, y garantizó que “no se molestarán”.
El senador liberal Carlos Amarilla garantizó que el Congreso tiene potestad para detener las acciones militares que ordene el Poder Ejecutivo, en caso de que se obre mal.
Con el objetivo de combatir más duramente al EPP, el Parlamento modificó la Ley de Defensa Nacional, convirtiendo a Horacio Cartes en el presidente con más poder de fuego en la era democrática de Paraguay.
La Coordinadora de Derechos Humanos del Paraguay (Codehupy), señala la nueva Ley de Defensa Nacional es inconstitucional y que organismos internacionales señalan que en asuntos de seguridad interna debe intervenir la Policía y no las Fuerzas Armadas.
El senador liberal Carlos Amarilla sostuvo que las modificaciones a la ley de defensa nacional se introdujeron porque hay un reconocimiento explícito de que las fuerzas policiales fueron rebasadas en su lucha contra el EPP.