La Central Unitaria de Trabajadores Auténtica (CUT-A) sospecha que el gobierno se pasa especulando para no analizar una posible suba de los salarios. Autoridades sindicales, anuncian una serie de movilizaciones, a nivel local y en la Triple Frontera, que podría encaminarse, para más adelante en la realización de una huelga general.
El anteproyecto de ley para empleo a tiempo parcial que impulsa la Cámara Paraguaya de Supermercados (Capasu) requiere un debate adecuado por parte de los afectados, porque se trataría de una flexibilización del Código del Trabajo, dijo ayer el secretario general de CUT-A, Bernardo Rojas.
Según la Central Única de Trabajadores auténtica, el reajuste del salario mínimo debe ser de al menos G. 500.000 teniendo en cuenta los informes oficiales del Banco Central del Paraguay (BCP).
Los datos oficiales de la pobreza “revelan lo que veníamos diciendo, que se maquillan los informes”, dijo Bernardo Rojas, dirigente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT-A). Marcial Gómez, de la Federación Nacional Campesina (FNC), atribuyó el crecimiento de la pobreza a la falta de política de apoyo a la producción campesina, a la tierra y desalojos, entre otros factores.
Las centrales obreras reclamaron que el reajuste de sueldo se extienda igualmente a los trabajadores que ganan más del salario mínimo. El sistema aprobado ayer en Diputados “nos jode a todos”, lamentaron.