22 de diciembre de 2024
No solo de cuentos clásicos se alimentan los libros para niños. La literatura infantil propone también una combinación de textos informativos (sociales, históricos, científicos), imaginarios, asombrosos y curiosos; muchos de ellos con desenlaces inconclusos, para que el pequeño y ávido lector persiga conocer más al respecto y, a su vez, imagine su propio final. Este es el estilo de narración encarado por la escritora Verónica Abente (43), cuyas dos publicaciones –Soy celiaco (disponible en librerías desde el 28 de abril de 2015) y Los Niños de Agosto (presentado el pasado 10 de agosto)– reflejan su amor por las letras y sus ideales.