El senador Eduardo Nakayama (PLRA) advirtió ante el pleno que el Congreso no puede declararse “Dios, Patria y familia” porque sería imponer una religión; subrayó que la Constitución ya protege al matrimonio tradicional pero también a las familias de “madres solas” producto de una sociedad irresponsable. Agregó que una ley no puede derogar un tratado internacional y llamó al Paraguay a ser más agradecido con las cooperaciones.
La Cámara de Senadores se declaró en favor de la vida y de la familia tradicional. Hubo un largo debate porque la declaración excluye, por ejemplo, a las madres solteras, o a personas que no sean cristianas.
El tratamiento del proyecto que declara a la República del Paraguay como pro vida y pro familia enfrentó a los diputados y terminó por dejar sin quorum la última sesión ordinaria del periodo legislativo. Hicieron tres condecoraciones sin quorum.