21 de noviembre de 2024
La tecnología actual ha permitido a los neurocientíficos observar cómo funciona el cerebro en tiempo real y relacionar la actividad cerebral con la experiencia subjetiva. Aunque la neurociencia –que, frente a la idea del cerebro como unidad estable con un conjunto estable de características, plantea un cerebro plástico, que en realidad es un proceso que integra la experiencia y el contexto vital del sujeto en sus patrones de organización– es relativamente joven, ya ha producido aportes interesantísimos.