Ya desde algunos años se instaló en los colegios la costumbre de celebrar el último primer día (UPD). En la organización se involucran la comitiva de padres, profesores y alumnos. Los chicos pasan la noche juntos, esperando el gran día y, cuando llega la hora, van al colegio a celebrar a lo grande. El colegio San Ignacio de Loyola es uno de los que cada año se luce con el UPD, a finales de febrero. Los alumnos de la promoción 2016 llenaron de algarabía la pista central y todos lucían las mismas remeras, exclusivas para ese día, además de espumas, mucho ruido y color. Luego, los directivos del colegio y algunos padres dedicaron emotivas palabras a los alumnos, quienes están a pasos de culminar con esta hermosa etapa.