17 de noviembre de 2024
PRESIDENTE HAYES. La excesiva salinidad del agua habría sido uno de los factores que llevaron al fracaso al proyecto de las dos desaladoras del Chaco, las cuales costaron en su momento US$ 3 millones y que apenas operaron. Pese a que supuestamente fueron hechos estudios previos, el agua extraída era cuatro veces más salina de lo previsto y apenas utilizable.