BUENOS AIRES. El embarazo adolescente, una problemática que retrasa a las jóvenes en sus estudios y condiciona su autonomía, desarrollo profesional y familiar, ha caído en Argentina, según datos oficiales, producto de la educación sexual y la distribución de anticonceptivos, pero también por la ola feminista que las hace más conscientes de sus derechos.
El Ministerio de Salud anunció la compra y disponibilidad de anticonceptivos orales de la marca “Microginon”. Pidió a las mujeres interesadas en acceder al mismo, acercarse a los consultorios de Planificación Familiar dependientes del ministerio.
El Estado ofrece una serie de opciones para evitar el embarazo no deseado. Pero, en caso de que una opte por un método irreversible para no ser madre –y no piense en el aborto–, salud pública solo le hará la cirugía, irónicamente, tras haber tenido hijos.