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En conversación con ABC Cardinal este lunes, el contralor general de la República, Camilo Benítez, celebró el anuncio del plan de “hambre cero” presentado hoy por el presidente Santiago Peña para buscar una cobertura del 100 por ciento en la provisión de alimentación escolar en instituciones públicas y señaló que la Contraloría necesita más presupuesto para llevar a cabo los controles necesarios en las escuelas y colegios de todo el país.
Hoy, el presidente Peña anunció un proyecto de modificación de la ley del Fondo Nacional de Inversión Pública y Desarrollo (Fonacide), por el cual se daría al Ministerio de Desarrollo Sostenible la responsabilidad de distribuir alimentos a las escuelas y colegios públicos en Asunción y a los gobernadores la tarea de la distribución en sus respectivos departamentos, atribuciones que actualmente son del Ministerio de Educación y Ciencias.
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“Con hambre no se puede estudiar; muchos niños van a la escuela solo para comer”, dijo el contralor Benítez. “Los municipios con menor cobertura tienen mayor deserción escolar, la comida es clave para la educación, que se pueda implementar ‘hambre cero’ va a ser un cambio de paradigma para la historia”, subrayó.
Indicó que la Contraloría buscará hacer “controles en tiempo real” del cumplimiento de la provisión de alimentos, para lo que creará una plataforma digital en la que podrá cruzar sus datos con los del Poder Ejecutivo y agregó que buscará la habilitación de un portal al que la sociedad civil pueda acceder para participar en ese control.
Más presupuesto para Contraloría
Sin embargo, enfatizó que la efectividad de los controles por parte de su institución dependerá de que “se aplique una asignación presupuestaria mayor para Contraloría, en especial en bonificaciones para auditores” para que sea posible realizar controles aleatorios en escuelas y colegios en todo el país.
“Planteamos hacer un control doble, concurrente, informatizado, pero también caerles a las escuelas todos los días del año” de forma aleatoria, explicó.
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Consultado sobre su opinión con respecto al proyecto de ley anunciado por el Ejecutivo, el contralor dijo que “me encantó la idea” y señaló que el trabajo del Ministerio de Educación no debería ser el de manejar la logística de la provisión de alimentos, sino centrarse en programas educativos.
“El Ministerio de Desarrollo deberá invertir en fortalecer su institución, pero hay tiempo y vamos a tratar de ayudar en la mayor medida posible”, agregó.
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Sobre la posibilidad de que la asignación de fondos –que estaría a cargo de un consejo administrador que incluiría a representantes de gobernadores, intendentes y de los ministerios de Economía, Educación y Desarrollo– sea utilizada como una herramienta política para premiar o castigar según la postura o alineación política de determinados gobernadores o intendentes, el contralor pidió que la conversación se centre “en los niños” y no se convierta en una arena política.
“Si la ley propone que todos los niños reciban alimentos, no creo que el consejo pueda tener la discrecionalidad de no transferir a un intendente o a otro”, argumentó.