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Pedro “Pipo” Díaz Verón, actual senador cartista electo, tenía disponibles G. 7.049 millones del Fondo Nacional de Inversión Pública y Desarrollo (Fonacide), de los cuales G. 3.285 millones eran para almuerzo escolar y G. 3.763 millones para obras de mejoras en instituciones educativas de Caazapá. Sin embargo, solo llegó a utilizar G. 3.472 millones, de los cuales G. 3.321 millones fue en obras y apenas G. 151 millones para la distribución del almuerzo escolar.
La falta de gestión y programación privó a los niños de Caazapá del suplemento nutricional, en un departamento considerado con mayor pobreza extrema (33%) seguido por San Pedro y Concepción, según los datos actuales del Instituto Nacional de Estadística (INE).
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Pipo Díaz Verón soportaba varias denuncias ante el Ministerio Público, incluso el fiscal Osmar Legal el 14 de enero del 2022 allanó la sede departamental en busca de documentos y once días después, Díaz Verón se pasó rápidamente del movimiento Fuerza Republicana al cartismo y las causas sugestivamente quedaron congeladas bajo la gestión de la entonces fiscala general Sandra Quiñónez, de quien se dice respondía a Horacio Cartes, líder del cartismo.
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Pipo Díaz Verón renunció en enero pasado a la gobernación para dedicarse a su candidatura al Senado.