El reconocido abogado habló ayer desde la ciudad de Dolores, provincia de Buenos Aires, donde mañana a las 13:00 horas se iniciará la lectura de la sentencia del crimen del joven Fernando Báez Sosa, quien tenía 18 años de edad cuando fue asesinado a patadas en la madrugada del 18 de enero de 2020 frente a un boliche de la ciudad argentina de Villa Gesell.

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El abogado Burlando resaltó el salvajismo con que actuaron los rugbiers y sostuvo de nuevo que el crimen fue cometido con premeditación y alevosía, por lo que al criterio de ellos no cabe otra sanción que la cárcel de por vida. También destacó el apoyo que recibieron del público paraguayo que siguió el caso de cerca.

El mencionado abogado es el líder del equipo jurídico que representa a los paraguayos Silvino Báez y Graciela Sosa, padres de Fernando Báez Sosa.

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Aguardan la sentencia

El matrimonio paraguayo, oriundo de Carapeguá, departamento de Paraguarí, se encuentra acompañado en Argentina por familiares cercanos que viajaron desde nuestro país para participar de este momento tan difícil que le tocó pasar a la familia.

Graciela Sosa afirmó que por fin llegó el día que tanto esperaba y en el que aguarda que el Tribunal de Sentencia dicte una condena ejemplar. Sostuvo que la única pena que espera que se aplique es la prisión perpetua.

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En un desgarrador testimonio, la madre de Fernando Báez Sosa dijo a ABC que siempre soñó con ir a un juicio en el que su hijo participara como abogado, pero que nunca se imaginó que al primero que asistiría sería precisamente por el asesinato de su hijo.

Fernando Báez Sosa era un joven argentino, hijo de paraguayos, que terminó el colegio en el año 2019 y que había ingresado para la carrera de Derecho.

Justo antes de que comenzaran las clases viajó de vacaciones a la balnearia localidad de Villa Gesell con un grupo de amigos para que su vuelta iniciara la carrera universitaria.

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Sin embargo, sus sueños de ser abogado quedaron truncados la madrugada del 18 de enero de 2020, cuando fue asesinado a patadas por un grupo de rugbistas que hoy podrían conocer su sentencia que en Argentina se espera que sea de por vida.

Silvino Báez, el padre de Fernando, por su parte indicó que en todo momento se sintieron muy acompañados, tanto en Argentina como en Paraguay, luego de la tragedia que les tocó vivir.

Los padres de Fernando coincidieron en que ninguna condena les devolverá a su hijo y ya saben que Fernando ya no volverá, pero que con una pena justa por lo menos podrián encontrar una explicación o consuelo a todo lo que pasó.