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Desde hace más de un año que se presentan pedidos de reparación en la Unidad de Cuidados Intensivos de Pediatría del Hospital Nacional de Itauguá. Sin embargo, los reclamos no tuvieron eco favorable hasta ahora que el techo se cayó en un sector. Hace dos semanas, debido a que chorreaba agua desde el techo, y amenazaba con desprenderse se clausuró un sector donde están 6 camas.
Ya el lunes 31 de agosto, la mampostería del techo cayó, y provocó que se tengan que cerrar dos camas más, en total ocho.
La situación es más grave si se tiene en cuenta la necesidad que existe en todo el país de contar con más camas de terapia infantil y que a pesar de ello no se realizaron los trabajos para evitar que se llegara a las condiciones actuales.
“Hace un año que pedimos socorro, pero no nos hicieron caso, hasta que llegamos a este punto que es un crimen porque le privamos de terapia a muchos niños. Nos desenvolvemos con total precariedad, los equipos obsoletos, sólo nos dieron dos monitores, pero en realidad la mayoría ya está obsoleto”, destacó una fuente médica quien destacó que la capacidad del Nacional es de 20 camas pero por falta de equipos y personal sólo 15 están habilitadas.
Mientras tanto causa indignación entre los profesionales de la salud que se hayan realizado mejoras no urgentes como las ejecutadas en el sector de la dirección, desde los pasillos, pasando por las salas de espera, dos salas de reuniones más los despachos. Se realizó la pintura total del sector, se cambió el piso por uno de porcelanato, a pesar de que no estaba deteriorado que en el sector de Terapia, y se colocaron al menos cuatro puertas de blindex que no eran absolutamente necesarias.
El ex director del Hospital, Dr. Gustavo Ortiz, señaló que la reparación de la terapia de niños requiere un tratamiento especial y que eso ya se había solicitado a la Dirección de Recursos Físicos. Señaló que las obras en la dirección estaba dentro de un conjunto de 12 lotes que incluyó la reparación de la Urgencia Adultos, Urgencia Pediátrica, iluminación de la parte externa, reparaciones de cerco de protección de balcones, y que costaron en total G. 544 millones.