Por su parte, el jefe del Estado Mayor Conjunto, general David Dempsey, opinó que “ésta era, probablemente, la última y la mejor oportunidad de liberar” al sargento de Ejército, de 28 años de edad, cautivo en Afganistán desde junio de 2009.
En el canje de prisioneros, Estados Unidos envió a Qatar a cinco miembros de los talibanes que estaban encarcelados desde 2002 en la base naval estadounidense de Guantánamo, en la isla de Cuba.
El canje ha sido criticado por el Gobierno de Afganistán y por sectores políticos de Estados Unidos, incluidos miembros del Congreso que afirman que, por ley, el Poder Ejecutivo debió notificarles el canje con al menos treinta días de anticipación.
La portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, Caitlin Hayden, indicó esta mañana que, “dados los informes creíbles sobre el riesgo de daño grave para el sargento Bergdahl y el rápido desarrollo de acontecimientos en torno a su recuperación, el Poder Ejecutivo actuó legalmente con la transferencia sin la notificación requerida por la Ley de Defensa”.
“El Gobierno determinó que la demora de la transferencia para cumplir con la notificación de treinta días hubiese interferido con el cumplimiento de dos funciones que la Constitución asigna al presidente: la protección de la vida de estadounidenses en el exterior y la protección de los soldados”, añadió.
Las circunstancias de la captura de Bergdahl por parte de un grupo afiliado a Al Qaeda también son motivo de controversia y algunos militares creen que el militar, ascendido a sargento en ausencia, podría haber desertado después de haber manifestado sus críticas a la guerra de Afganistán.
El general Dempsey dijo que “las cuestiones acerca de la conducta de este soldado en particular son separadas de nuestro esfuerzo para recuperar a todo miembro de las Fuerzas Armadas estadounidenses cautivo del enemigo”.
“En cuanto a las circunstancias de su captura, cuando él sea capaz las proporcionará, revisaremos todos los hechos”, agregó.
“Como todo estadounidense (Bergdahl) es inocente hasta que se pruebe su culpabilidad”.