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Invocando la Ley 5282/14, “De Acceso a la Información Pública”, este diario solicitó de nuevo ayer al Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) copias de los contratos del proyecto metrobús, formalizando el pedido verbal que ya veníamos haciendo a autoridades de la institución desde la semana pasada, cuando se firmaron los convenios.
Los cientos de propietarios de establecimientos comerciales que se oponen al proyecto y la ciudadanía toda no tienen forma de conocer las cláusulas del contrato que firmó el MOPC con la portuguesa Mota-Engil (representada por Víctor Gomes Alves), como tampoco el que esta empresa firmó a su vez con la empresa local Ocho-A, de Luis Pettengill, que será la subcontratista.
En ese sentido se debe mencionar que hasta el día en que se firmó el contrato, el jueves de la semana pasada, la información revelada por el MOPC había sido que la adjudicada y por ende la que ejecutaría los trabajos era Mota-Engil.
Recién el día de la firma del contrato el ministerio dio a conocer que Mota-Engil tenía a su vez un acuerdo con la empresa local Ocho A, para que finalmente esta ejecute los trabajos.
Hasta el momento se desconoce cuál es el porcentaje de las obras que Mota-Engil ejecutará y qué porcentaje le corresponde a la firma subcontratada, porque el MOPC se niega a entregar copias de los contratos.
Sin diseño, sin garantías, sin nada
La empresa adjudicada debe hacerse cargo del diseño del sistema troncal del metrobús, un contrato financiado mayormente por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que condicionó el financiamiento a la aplicación de sus normas.
Esto quiere decir que para este contrato no rige el tope del 20% del monto del contrato en las futuras y muy probables ampliaciones en el presupuesto.