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El abogado Wilfrido Fernández, de la Coordinadora de Comisiones Vecinales de los barrios que se verán afectados por el futuro tren de cercanías entre Asunción e Ypacaraí, señaló esta mañana que con el proyecto de ley sancionado habrá una “carnicería” para liberar el tramo del antiguo ferrocarril.
Advirtió que son numerosas las propiedades con título que se verán afectadas, por lo que las expropiaciones costarán una fortuna. Además, resaltó que con plan normativo que será promulgado por Ejecutivo, el Estado admitió que Fepasa ya no tiene la franja de dominio del antiguo ferrocarril, por lo que primero deberá gastar millones para liberarla.
En este sentido, cuestionó el Art. 16 de la normativa sancionada, que señala que el ancho de superficie utilizada para el tren será de hasta 14 metros a cada lado del eje central de la vía del tren, o sea, 28 metros en total.
“Ahí, en el trazado del antiguo ferrocarril, están, por ejemplo, la Cruz Roja Paraguaya, la Fundación de Ojos Fernando Oca del Valle y otras clínicas, predios que son de instituciones y de utilidad pública, que no son edificios privados ni casas privadas. Ahora piden 28 metros, o sea, 14 metros a cada lado de cada vía, y si van a aplicar eso, como regla general, se va a hacer una ‘carnicería’ que, en primer lugar, cuesta dinero y en segundo lugar no tiene ningún sentido hacerlo, puesto que existen tantas otras alternativas”, manifestó.
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En este sentido, Fernández resaltó que en todo el mundo el ancho que necesita una franja de dominio para un tren de cercanía moderno, de doble vía, no pasa de ocho metros en total, incluyendo los dos lados de la vía, como se puede observar en Buenos Aires, y en cualquier otra ciudad del mundo. “En esta ley se pide 28 metros, al menos como regla general, que es tres veces más de lo que se necesita”, explicó.
Proyectos que fracasaron porque Fepasa ya no tiene la franja de dominio
Asimismo, Fernández resaltó que desde 1998, año en el que el ferrocarril dejó de funcionar, hubo varios proyectos para el tren de cercanías, pero uno tras otro fracasó porque ninguna administración de Fepasa o del MOPC reconoció transparentemente que el tren no tiene franja de dominio.
“En consecuencia, eso era un problema no insoluble, pero es un problema que habría que encararlo de forma honesta, responsable y transparente. Todas las administraciones de Fepasa han sostenido en todos los proyectos que ya es propietaria de una franja de dominio en el tramo Asunción-Ypacaraí, lo cual no es cierto, no porque nosotros digamos que no”, argumentó.
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Ejecutivo debe promulgar la ley sancionada
La Cámara de Diputados sancionó ayer, en su última sesión ordinaria de este año, el proyecto de ley con el cual se pretende implementar el tren de cercanías entre Asunción e Ypacaraí. La aprobación se consumó sin debate y sin objeciones a la versión del Senado, por lo que queda a cargo del Ejecutivo su promulgación.
El plan normativo autoriza al MOPC a suscribir una adenda al contrato de concesión celebrado con Fepasa y que permite a esta última suscribir con el sector privado uno o más contratos de “subconcesión”, por un plazo de hasta 35 años, incluyendo el plazo de la fase constructiva. Fepasa deberá realizar una licitación para seleccionar al “subconcesionario”.
El texto sancionado le da a Fepasa no solo la posibilidad de evadir las leyes 1.618/2000, de concesiones de Obras y Servicios, la 5.102/2013, de Alianza Público-Privada (APP) y la 7.021/22, de Contrataciones Públicas, sino también a la ley N° 1.535, de “administración financiera” del Estado.
El “puenteo” de la ley N° 1.535 se realizará pese a que durante los 35 años de “subconcesión” que otorgará Fepasa a uno o más socios privados, el Estado realizará millonarios desembolsos al fideicomiso que crearán para pagar obligaciones a la empresa que resulte adjudicada para construir, operar y mantener el ferrocarril eléctrico.