Cargando...
En un recorrido por las vías del extinto ferrocarril de Asunción, un equipo periodístico de ABC constató el desalojo de varias familias en puntos que considerados conflictivos. Son antiguos ocupantes precarios que en su momento ya habían sido llevados a otros sitios, pero que con el anuncio del nuevo tren, regresaron.
Pero el Gobierno no ha informado detalles de este nuevo proyecto. Vecinos frentistas que residen formalmente desde hace décadas en la zona tampoco han recibido reportes formales referente a los planes de instalación del tren de cercanías impulsado por el presidente de la República, Santiago Peña.
Entre las zonas que eran conflictivas se encuentra la intersección de Artigas y Venezuela, cuyos ocupantes fueron trasladados a viviendas sociales del barrio San Blas, diseñado por el Ministerio de Urbanismo Vivienda y Habitat (MUVH). Eso, según declaraciones de afectados y otros testimonios recabados en reporteos anteriores realizados por ABC.
Carmen Lagiu, lugareña, mencionó ayer que la intención de “resucitar” el tren y usar las antiguas vías es un plan que data de hace décadas y que cada gobernante de turno ha planteado hacerlo atropellando a los residentes que viven en las inmediaciones de las vías del tren.
Recordó que en reiteradas ocasiones se realizaron manifestaciones, incluso durante la anterior administración de Facundo Salinas al frente de Ferrocarriles del Paraguay SA (Fepasa), durante el mandato de Horacio Cartes (2013-2018). Salinas volvió al cargo, de la mano de Peña, y ni siquiera se acercó a los vecinos.
“(Facundo) Salinas ya nos conoce y ahora durante el tratamiento y sanción, ni se presentó a conversar con nosotros. No sabemos cuál es el diseño, si se usará las antiguas vías del tren o un nuevo trazado. Nada”, dijo.
Lea más: Ley del tren, una muestra de la inseguridad jurídica
Inicialmente, en el periodo legislativo anterior, el plan era utilizar las antiguas vías del tren. Ahora, con la sanción de la Ley N° 7237 que aprueba disposiciones especiales para la instalación del tren sólo se estipula que el tramo será Asunción- Ypacaraí, sin más detalles técnicos ni financieros. Esto fue lo más cuestionado por parlamentarios de la oposición.
El portal institucional de Fepasa no informa sobre los planes actualizados del Gobierno. Lo poco que allí se encuentra son informes que no coinciden con lo planteado con la ley sancionada.
El Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) tampoco responde pedidos de datos públicos hechos vía Acceso a la Información Pública (AIP).
“El dominio público no se puede transferir”, asegura especialista
El abogado Theodore Stimson, experto en derecho administrativo, opinó que históricamente, la franja de dominio de las vías del tren ha sido de 20 metros a cada lado de la vía del ferrocarril, es de su pertenencia y no puede abandonar sus derechos, aún si hayan actos que así lo parezcan pues son hechos nulos. Las declaraciones las brindó ayer, a ABC.
“La franja de dominio es lo que llamamos de dominio público del Estado, y a la categoría se le atribuye inalienabilidad, imprescriptibilidad e inembargabilidad”, afirmó. Agregó que lo central es que, conforme a las normativas vigentes, las disposiciones no prescriben.
“Es decir, el dominio público bajo ningún punto de vista se puede invadir o apropiar por algún particular, ya sea por el transcurso del tiempo o vías de hecho, porque tiene una protección especial del sistema jurídico que defiende porque está afectando a toda la población”, aseguró Stimson.
“Ningún particular puede invocar algún derecho en perjuicio del Estado, sencillamente porque ese dominio no es transferible”, dijo.
En este contexto, puntualizó, el Estado puede usar la fuerza pública para liberar el suelo que corresponde como espacio de seguridad de la vía férrea sin obligación de compensarle a nadie. Ni corresponde una expropiación.
En cuanto a la duplicación de la franja de dominio, recientemente sancionada (de 7 a 14 metros), indicó que el dominio público es de 20 metros, y las normativas posteriores son nulas.
El abogado finalizó diciendo que el interes de unos particulares no puede estar por encima del superior. Pero que incluso los frentistas no tendrían inconvenientes de mudarse si el Estado les ofreciera un mejor sistema de transporte público.
Lea más: Presidente de Fepasa denuncia invasión de las vías del tren