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Junto al arroyo se encuentra el local de Casa Mayor, una galería de arte. Desconozco si la obra pertenece o está relacionada con esta galería de arte, lo cierto es que resulta en extremo llamativo lo que se ha hecho: han construido una muralla bastante alta (dos metros y medio aproximadamente) junto a la baranda que separaba la vereda del arroyo, y para evitar que algún curioso suba sobre ella la han rematado con pedazos de vidrio. Por si fuera poco, han tapado parte del sumidero de aguas pluviales con madera.
Con esfuerzo pude obtener unas fotografías de lo que están haciendo en el cauce del arroyo, y eso me dejó aún más consternado: están construyendo una estructura de hormigón armado, directamente montada sobre el arroyo.
Me pregunto: ¿Los que realizan la obra son dueños de esa porción del arroyo? ¿Está permitido este tipo de construcciones en el lecho de cursos de agua? ¿Por qué tanto secreto hasta el punto de levantar una muralla de 2,5 metros de altura y tapar los sumideros?
En el pasado ya habían empezado esta misma obra, a la vista de todos, pero según cuenta un vecino fueron cuestionados por funcionarios municipales y la demolieron. Ahora lo hacen al resguardo de esta muralla.
Agradeceré hagan pública esta situación para que, en caso que sea irregular, llegue a conocimiento a quien corresponda tomar cartas en el asunto.
Guillermo García Orué
Nota de redacción: ABC Color se comunicó con Graciela Mayor, dueña de la galería, quien confirmó que el terreno donde se encentra el arroyo Mburicaomí es de su propiedad.
Argumentó que la construcción obedece a que dicho murallón necesitaba un refuerzo, además, para evitar que las personas arrojen sus desechos al cauce hídrico.
Mayor confirmó que efectivamente ya fue denunciada con anterioridad por haber construido una muralla similar (que posteriormente fue demolida) porque ocupaba unos centímetros de la vereda.
Asegura que es objeto de persecución por parte de personas que la denuncian, pues ahora ya tiene todas las autorizaciones municipales en regla, razón por la cual volvió a construir la pared.
Finalmente indicó, en referencia a esta denuncia específica, que la persona que la denuncia incurre en faltas a la ley al tomar estas fotografías, como ser invasión de propiedad y atropello de domicilio.
ABC Color pone a disposición de los lectores de Crónicas Ciudadanas los antecedentes de este caso:
El 4 de diciembre de 2013, el Departamento de Fiscalización de Obras de la Municipalidad de Asunción intervino la construcción de la muralla de mampostería que se estaba ejecutando sobre el puente del arroyo.
Esta decisión obedeció a que la obra no contaba con el permiso municipal según el acta Nº 21704, por lo que horas después se procedería a solicitar la demolición del muro, hecho que fue admitido por Graciela Mayor.
Tras la demolición de la pared, Mayor propuso construir un centro cultural encima del cauce para revitalizar la zona, teniendo en cuenta los malos olores generados ya que el mismo es usado como desagüe de desechos líquidos por varios comercios.
Sin embargo, la comuna rechazó dicha propuesta, alegando que la construcción por encima de un cauce hídrico está prohibida por la Ley Orgánica Municipal.
El 6 de enero del 2014, la Dirección de Recursos Naturales de la comuna anunció que intervendría el cauce del arroyo, debido a que continuaban los malos olores.
En la oportunidad, Mayor aseguró que como propietaria del inmueble, la Municipalidad le cobra los impuestos por el cauce del arroyo, aunque en el mismo título de propiedad no figura la existencia del afluente.
Durante la intervención, la Essap anunció la construcción de una tubería de 60 centímetros de manera que los frentistas y los comercios aledaños, en lugar de verter sus desechos al cauce, lo hicieran en la red cloacal.