Entre mayo y noviembre, los visitantes de la torre metálica podrán disfrutar de actos culturales y espectáculos, entre ellos una exposición inmersiva en la que un Gustave Eiffel digital les muestra la historia de su construcción.
Durante el verano se inaugurará una exposición en el atrio del monumento y en el otoño, la “Dama de Hierro” albergará un espectáculo que combinará la música electrónica y el arte digital.
Lea más: La torre Eiffel enarbola una bandera como preparación a los juegos de 2024
El servicio de Correos francés emitirá también un sello conmemorativo a partir del 27 de marzo.
“Construir a finales del siglo XIX una torre de 300 m de altura en el corazón de París, la mayor torre del mundo en esa época, es un desafío increíble, del orden de la ciencia ficción”, explicó Jean-François Martins, presidente de la compañía pública que gestiona la torre.
La Torre Eiffel, genialidad humana
“Conmemorar el centenario de su desaparición es celebrar ese espíritu de conquista científica, la genialidad humana”, añadió.
Por su parte los descendientes del ingeniero, autor de otras importantes obras en Francia y en numerosos países, anunciaron que han solicitado el ingreso de los restos de Gustave Eiffel en el Panteón de personalidades ilustres francesas, en París.
“Gustave Eiffel encarna la Francia industrial, y fue un dirigente con ideas socialmente avanzadas”, aseguró su tataranieta, Myriam Larnaudie-Eiffel.
Eiffel diseñó puentes en China, Vietnam o Bolivia, iglesias en Perú o Chile, el puerto de la ciudad portuguesa de Oporto, la estación de ferrocarril de Budapest o el armazón de la Estatua de la Libertad de Nueva York.
La Torre Eiffel acogió 6,2 millones de visitantes en 2022 y generó 100 millones de euros en ingresos (unos 105 millones de dólares).