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Las instalaciones de Tesla, situadas en el sector de Neihu, combinan la sede administrativa de la empresa en Taiwán con un centro educativo y de pruebas, así como una sala de exhibición y un taller de servicio.
Se espera que el complejo desempeñe un papel clave en el desarrollo de la industria de vehículos eléctricos (EV, siglas en inglés) de la República d China, Taiwán.
Shen Jong-chin, viceministro de Economía, declaró en la ceremonia de inauguración de la sede que los EV son parte de la política de energía verde del Gobierno, ya que reducen la dependencia de las importaciones de petróleo y las emisiones de gases de efecto invernadero del país.
Por su parte, Robin Ren, vicepresidente de Tesla para Asia y el Pacífico, replicó que el entusiasmo del Gobierno por las industrias innovadoras es apreciado y resulta un buen augurio para la industria de los EV en Taiwán.
Tesla reciprocará este apoyo ayudando a las empresas locales a cultivar un ecosistema para los EV, manteniendo la inversión en la infraestructura de estaciones de súper cargadores para recarga y colaborando con las instituciones de educación terciaria de la nación a fin de cultivar los talentos necesarios a fin de desarrollar la industria de los EV, agregó Ren.
Taiwán es el vigésimo quinto mercado de Tesla en el mundo, y el sexto en la región de Asia y el Pacífico, después de Japón, Hong Kong, Singapur, Macao y China continental.
Si bien los automóviles de Tesla han estado disponibles para el consumidor taiwanés desde diciembre del año pasado, el fabricante estadounidense de EV tiene una larga historia de colaboración con los proveedores de componentes taiwaneses, desde el prototipo Tesla Roadster, el primer EV de Tesla, que entró en producción en 2008.