Este evento no será una excepción en la cultura tradicional de Apple: el grupo no ha dicho en qué consiste el show, previsto para las 17H00 GMT, pero la empresa tiene la costumbre de desvelar sus nuevos smartphones en esta época del año.
Según los analistas, la firma de la manzana va a lanzar un aparato de alta gama bautizado “iPhone X” , que se pronunciará “10” , en honor a la primera década de este móvil, que ha revolucionado el sector y que ha vendido ya más de 1.200 millones de ejemplares.
No hace falta decir que el evento del grupo es esperado con impaciencia, tras unos años sin grandes innovaciones asombrosas en su producto estrella.
“La presentación del iPhone este año es, de lejos, la más esperada, teniendo en cuenta que esperamos el cambio de diseño más importante desde el iPhone 6 (en 2014) y que el nuevo aparato integre funcionalidades revolucionarias”, escribió en una nota Amit Daryanani, analista de RBC Capital Markets.
El iPhone-aniversario podría estar dotado de una pantalla último grito OLED, que ofrece una imagen más neta y más contrastada, y que recubriría prácticamente la totalidad de la superficie del teléfono haciendo desaparecer el famoso botón redondo “Home” , situado bajo la pantalla. El desbloqueo del aparato podría hacerse por reconocimiento facial en 3D gracias a la incorporación de una segunda cámara de fotos.
Además, incorporaría funciones 3D que podrían servir para lanzar plenamente el iPhone en la realidad aumentada. Empleada en los juegos de vídeo (para insertar personajes en el mundo real) o en la decoración de interiores (para probar el color de un nuevo sofá en el salón), la realidad aumentada es considerada un eje fundamental en el futuro de los móviles.
El aparato tendría también una parte trasera de cristal en vez de metalizada, y permitiría cargar la batería sin cable, una función particularmente esperada por los aficionados, según los analistas. Todas estas novedades tendrán un costo: el iPhone X podría salir a 1.000 dólares, o hasta 1.200 o 1.400 según diversos rumores. A este precio, “va a hacer falta que sea mágico”, estima el analista independiente Rob Enderle.
El gran rival de Apple, el surcoreano Samsung, acaba de lanzar su smartphone de alta gama y gran formato, el Note 8, que estará disponible a partir del viernes por un precio cercano a los 1.000 dólares en Estados Unidos.
Además de sus funciones, fanáticos y analistas examinarán la fecha de comercialización del iPhone. Según rumores persistentes, existen retrasos en las cadenas de montaje en Asia, lo que podría llevar a Apple a lanzar su nuevo aparato en cantidades limitadas en un primer momento.
Apple debería lanzar también versiones mejoradas, pero más clásicas, del iPhone: un “8” y un “8 plus” , con baterías de vida más prolongada o mayor capacidad de almacenaje.
Siempre en las especulaciones, el grupo podría también presentar un nuevo modelo de AppleTV, capaz de difundir programas en 4K (ultra alta definición) o la versión 3 de su reloj Apple Watch, que podría conectarse directamente a las señales móviles sin pasar por el iPhone.
Apple y Samsung reinan sobre los smartphones con cerca de 12% y 23% del mercado, respectivamente, pero deben hacer frente a la creciente competencia de grupos chinos, particularmente Huawei, que vendió más teléfonos que Apple este verano, según la firma Counterpoint Research.
La empresa estadounidense vendió más de 41 millones de aparatos iPhone entre abril y junio (+1,6% respecto al mismo periodo de hace un año) por 25.000 millones de dólares, equivalente a 45% de su volumen total de negocio.
El lanzamiento tendrá un escenario adecuado a su magnitud: el Steve Jobs Theater, el auditorio en la nueva sede del grupo en Cupertino, al sur de San Francisco, un vasto edificio circular con aires de platillo volador.