BYD (“Build Your Dreams”, construya sus sueños) alcanzó el año pasado un beneficio neto de 30.040 millones de yuanes (4.160 millones de dólares), un alza de un 80,7% frente a 16.600 millones de yuanes del 2022, indicó el grupo en un comunicado.
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En el ejercicio 2022, el beneficio neto progresó a un ritmo mucho más rápido (+445,8%).
Los ingresos de BYD para 2023 también subieron en un año (+42%), hasta situarse en 602.300 millones de yuanes.
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BYD es el principal constructor en China en el sector eléctrico y, el año pasado, se convirtió en fabricante líder mundial tras superar el umbral simbólico de cinco millones de vehículos híbridos y eléctricos acumulados.
El grupo comercializa actualmente estos dos tipos de autos en más de medio centenar de países, entre ellos en Europa. En diciembre anunció la construcción de una planta en Hungría.
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China, principal emisor mundial de gases de efecto invernadero, quiere llegar en 2035 a que la mayoría de ventas de automóviles sean autos eléctricos o híbridos.
Fabricante chino de autos eléctricos BYD en contexto de ralentización
El mercado chino en este sector se ha disparado gracias sobre todo a las ayudas de compra, que desaparecieron sin embargo a finales de 2022.
Para mantener el ritmo, en un contexto de ralentización económica, decenas de fabricantes locales se han lanzado a una guerra de precios.