La senadora Norma Aquino, conocida como Yamy Nal, utilizó su cuenta de X para hacer su descargo sobre el supuesto vuelo en primera clase en el que viajó a Córdoba para el encuentro del Parlasur, acompañada de sus hijas. La legisladora desmintió haber viajado en primera clase y aseguró que ella misma pagó los pasajes de sus hijas.
“Soy senadora de la Nación. Chúpate está mandarina Payo”, así fraseaba con mucho entusiasmo y sin vergüenza la senadora Norma Aquino, más conocida como Yami Nal. Una de las que no solo ya ni siquiera importa la traición que hizo a sus votantes, si no como evidencia que se hace política para beneficiarse de ella y a través de la “política” vivir una buena vida.
Inicio oficial de la Convención ordinaria de la Asociación Nacional Republicana (ANR). El presidente Santiago Peña y la senadora Yamy Nal se funden en un “abrazo republicano”.
Apoyar al cartismo, en el caso de la senadora Norma Aquino, alias Yami Nal, ex Cruzada Nacional ya empieza a tener frutos. Su hijo Giovanni Paolo Divitto Aquino, que apenas culminó el bachillerato, se atornilla en el Instituto Nacional de Estadística (INE).
La senadora cartista Norma Aquino –también se hace llamar Yami Nal- quiere limitar la libertad de expresión y de prensa contra lo que manda la Constitución Nacional: “...no se dictará ninguna ley que las imposibilite o las restrinja” (Art. 26). Solo podría hacerse con una reforma constitucional en la que los cartistas están muy atareados.
Hoy la ley de protección a las mujeres, que fue una conquista ciudadana, corre riesgo ante dos peligrosos enemigos: quienes la usan para censurar y quienes por este uso la quieren derogar.