Los funcionarios estatales son insaciables. Para disimular todo tipo de incrementos salariales que se les han venido concediendo en el Presupuesto nacional, sus padrinos instalados en el Congreso han inventado varias y rebuscadas figuras que conllevan más dinero a sus arcas, además de otros beneficios de los que no gozan los trabajadores del sector privado. Pues bien, este año recibirán más de 12 millones de guaraníes en concepto de subsidio familiar, fraccionados en varios rubros. Y así continúa el carnaval de repartija del dinero de todos en favor de los privilegiados “servidores públicos”. Según el BID, el funcionariado paraguayo es el mejor retribuido del continente, en términos relativos.
El Presupuesto General de la Nación (PGN) tiene asignado unos G. 260.000 millones (US$ 37,1 millones al cambio vigente) para el pago del “subsidio familiar”, como se lo llama últimamente en la función pública a la bonificación para los funcionarios.
El Ministerio de Hacienda pagó más de G. 2.000.000 a los directores, jefes de departamentos y coordinadores en concepto de “subsidio familiar”, que fue acreditado junto con el salario y el aguinaldo correspondiente. En abril habían cobrado los funcionarios y fue muy cuestionado por la ciudadanía, que todavía está tratando de recuperarse de los golpes de la pandemia.
Entre diciembre del año pasado y febrero del actual ejercicio, el Ministerio de Hacienda pagó a sus funcionarios G. 5 millones en concepto de subsidio familiar. Autoridades justifican el desembolso señalando que está en la ley y se realiza desde hace años.
La Dirección Nacional de Aduana (DNA) pagó ayer el equivalente al 80 por ciento del sueldo en concepto de “ayuda vacacional” a todos sus funcionarios. Sugestivamente, el desembolso se realiza dos días antes de las internas coloradas.