5 de noviembre de 2024
Un anciano de 78 años estuvo a punto de morir tras una golpiza propinada por su propio hijo de 47 años en la ciudad de Laurel, Canindeyú. Otros familiares le encontraron inconsciente y lo trasladaron hasta un centro asistencial. El hombre tras ser detenido pidió perdón y dijo prometer no volver a la casa de su padre.