El ministro Alberto Martínez Simón aceptó integrar la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia y hay vía libre para estudiar una recusación que presentó el usurero luqueño Ramón González Daher. La chicana fue planteada para trabar el estudio de apelación que presentó la defensa contra la condena a 15 años de cárcel por usura, lavado de dinero y denuncia falsa.
A dos meses que Óscar Rubén González Chaves, condenado a 8 años de cárcel por enriquecimiento ilícito, declaración falsa y lavado de dinero haya presentado un recurso extraordinario de casación, la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia continúa sin integrarse para resolver la chicana.
La Sala Penal de la Corte declaró inadmisibles los recursos de casación presentados, contra resoluciones de Tribunales de Sentencia y de Apelación, por el Ministerio Público y de la defensa de un narco condenado, en una causa en que fueron condenados químicos brasileños por narcotráfico. En consecuencia, quedan firmes las condenas de 8 y 9 años para cuatro acusados.
La lentitud en la Corte Suprema de Justicia para la integración de la Sala Penal para resolver chicanas planteadas en la causa de Ramón González Daher y la del hijo del ex senador fallecido Óscar González Daher favorece a los condenados por sendos casos de corrupción.
La causa del ex ministro de Corte, Miguel Óscar Bajac Albertini (83 años), se elevó a juicio en 2020, audiencia que no se puede realizar porque el expediente “duerme” en la máxima instancia judicial donde hasta hoy no se integra la Sala Penal, por una serie de inhibiciones, para resolver una contienda de competencia surgida. El fiscal Luis Piñánez ya elevó varios urgimientos.