La prensa brasileña redescubre Itaipú pero, según esas publicaciones, reincide en una suerte de calificación discriminatoria a nuestro país, que se resume en la frase; “en Itaipú el Paraguay solo puso el aguay Brasil el dinero.
Paraguay no cree conveniente adelantar las negociaciones con el Brasil sobre el manejo de la Itaipú Binacional, tal como lo planteó la semana pasada su nuevo director general brasileño, Luiz Fernando Vianna.
El arzobispo de Asunción, monseñor Edmundo Valenzuela instó al Gobierno a iniciar un proceso transparente para la inminente renegociación del tratado de la Itaipú Binacional con el Brasil. “La revisión del tratado debe ser transparente”, expresó durante la multitudinaria misa realizada en la explanada de la Catedral Metropolitana de Asunción, el pasado lunes.
Desde la firma del Tratado de Itaipú, un 26 de abril de 1973, se inició lo que varios especialistas califican como despojo al Paraguay, puesto que el Brasil fue el único beneficiado en estas cuatro décadas del aprovechamiento hidroeléctrico. Los datos actuales corroboran que la injusticia sigue vigente, puesto que el país vecino se lleva la mayor parte de la renta energética.
Telefónicamente desde su casa en Nueva York, el celebrado economista y experto internacional Jeffrey Sachs nos comenta algunas de las conclusiones de su análisis sobre la política energética de Paraguay. Se ratifica en que la porción paraguaya de la deuda de Itaipú Binacional ya está saldada, explica por qué y recomienda al nuevo gobierno plantear al Brasil una revisión objetiva y transparente de los números, tarea para la que él mismo se ofrece a colaborar. Esperar a 2023 para hacerlo sería un grave error, advierte.