El Ministerio de Hacienda informó que en el primer semestre de este año, los gastos en “servicios personales” de la Administración Central, que incluyen sueldos, dietas, aguinaldos y retribuciones adicionales, entre otros, crecieron un 9,9% con respecto al mismo lapso de 2022, en tanto que la recaudación tributaria tuvo un aumento de solo el 3,1%. Estos datos implican que el 68% de los ingresos genuinos fue consumido por unos 270.000 funcionarios y contratados que pululan en los Poderes Legislativo, Ejecutivo y Judicial. Suponen también que la correlación entre los gastos corrientes y los de inversión ha empeorado en beneficio de una vasta clientela, que dista mucho de brillar por su honestidad, su idoneidad y su diligencia.
Lea Giménez, ministra de Hacienda, afirmó que se analizaron las propuestas de presupuesto de Senadores y Diputados para adecuarlas a los ingresos del fisco.
Lea Giménez sostiene que, a excepción de una partida para adultos mayores, los gastos se mantienen. Señaló que aumentos se compensan con recortes, en una “reestructuración” acordada con Diputados. Sin embargo, proyecto del Ejecutivo era de G. 73,1 billones y el de la Cámara es de G. 73,7 billones. Ministra reconoció que todavía no recibió la versión final sancionada, que ahora pasa al Senado.