5 de noviembre de 2024
Si ya en un contexto de “normalidad la ciudadanía viene soportando injusticias, abusos y otras calamidades cotidianas en sus viajes en el mal llamado transporte público, imagínense a aquellas personas que padecen de alguna discapacidad. La sordera, la ceguera y la dificultad motriz son pasaportes seguros a la incomprensión y por sobre todo a la discriminación en un viaje en bus.