20 de abril de 2025
Los escalofriantes casos de abuso sexual infantil que emergen día tras día en el departamento de Paraguarí, nos obliga a enfrentar una realidad brutal: el lugar que debería ser sinónimo de seguridad y amor, el hogar, se ha convertido en una trampa mortal para muchos niños. Las estadísticas son alarmantes. Carapeguá, Caapucú, Acahay, Yaguarón y Quiindy se han convertido en epicentros de un horror que se perpetúa en el silencio y la complicidad de los familiares.
CAAPUCÚ. Un hombre fue denunciado por haber sometido a sistemática coacción sexual a su hija de 11 años, desde que tenía 8 años. La víctima rompió el silencio y reveló la coacción a una profesora de su escuela, desencadenando una investigación policial, judicial y de la Defensoría de la Niñez y la Adolescencia.
YAGUARÓN. En un allanamiento realizado por una comitiva fiscal-policial, en el barrio Santa Librada de este distrito, quedó detenido por segunda vez un hombre de 58 años, por el supuesto hecho de comercialización de estupefacientes. En la ocasión, se incautaron del poder del detenido 12 gramos de cocaína tipo crack, distribuidos en 54 moñitos de polietileno y dinero en efectivo de baja denominación.
PARAGUARÍ. El noveno departamento del país se posiciona como uno de los destinos favoritos por su diversidad de paisajes, que van desde cerros hasta saltos, playas y balnearios distribuidos en distintos distritos de la zona. En estos sitios naturales se están preparando para recibir a los visitantes que optan por el turismo interno durante la Semana Santa.
El Campeonato Departamental de Rally 2025, organizado por el ente denominado Centros Unidos del Noveno Departamento (CUP), arrancará este fin de semana con la disputa de la primera fecha del certamen en el noveno departamento de nuestro país.
LA COLMENA. Un médico denunció haber sido amenazado de muerte por intentar bañarse en el arroyo y el Salto Cristal, en el límite entre Paraguarí y Guairá. Según la Comisaría 22 de César Barrientos de este distrito, el hecho ocurrió el miércoles 2 de abril, cuando el denunciante y sus trabajadores fueron interceptados por un hombre que alegó ser dueño del lugar.