MADRID. Los árboles urbanos contribuyen a mitigar la gravedad de las olas de calor y a mejorar el confort humano en las ciudades, según ha comprobado un equipo internacional de científicos, que este lunes publica sus conclusiones en la revista Landscape and Urban Planning.
El primer mes de este año se caracterizó por superar récords diarios en temperaturas máximas en algunas ciudades. Es así que hasta en su último día, el 31, registró picos que baten índices de hasta hace alrededor de 50 años atrás.
El cambio climático podría suponer una amenaza para la fertilidad masculina, según un estudio publicado en la revista científica Nature, que reveló el daño que producen las olas de calor al esperma de los insectos.
Aunque no existe una definición universal sobre el fenómeno de «olas de calor», de acuerdo a los expertos, se trata de un periodo de al menos dos días de mucho calor diurno y nocturno.