morosos

Stan Cannova, analista económico, criticó a Petropar por ocultar datos públicos que evidenciarían si es eficiente el sistema de financiamiento que la estatal tiene con sus clientes, los cuales venden los productos de la empresa pública en sus estaciones de servicios. Las ventas se otorgan a créditos de un mes, según la versión oficial, pero según algunas fuentes extraoficiales, se darían “según la cara del cliente”.

La Municipalidad de Asunción ha decidido dejar de prestar el servicio de recolección de basura a cuarenta empresas que adeudarían, desde hace años, el pago de la tasa correspondiente. Es saludable que intente forzarlas a pagar lo que deben, pero el procedimiento escogido resulta del todo irregular y contrario al interés general, ya que la ley dispone que las deudas por impuestos, tasas y contribuciones no pagadas en los plazos fijados son exigibles judicialmente.

Ante el corte del servicio de recolección de basura a empresas morosas, la Municipalidad de Asunción informó que 140 firmas se acercaron a pedir un plan de pago a la Comuna, o a abonar. Anunciaron que poco a poco se irá publicando el nombre de más empresas que estén en deuda.

Petropar se aferra a su cláusula de confidencialidad en sus contratos para no socializar deudores y cartera de morosos, ítem que ni siquiera está establecido en todos sus contratos y que ninguna ley obliga agregar. El Ministerio de Justicia apoya al emblema estatal alegando “riesgo real”.

Petropar informó a Diputados que solamente cinco de los 231 operadores de estaciones de servicios que trabajan con su marca se encuentran con deudas vencidas, que totalizan US$ 1 millón, y que están en proceso judicial. Muchos de estos clientes tienen saldo a favor y refinanciamiento.