22 de noviembre de 2024
Pasó ya al menos una generación desde que se emitieron, hace 23 años, pero el mito continúa: que la moneda de G. 500, circulante desde 1997 y vigente hasta 2009, tenía una pizca de oro en ella. Un investigador numismático aclara esta frecuente consulta con una respuesta simple: la moneda no tiene el metal precioso. En esta nota, sin embargo, se detallan las raíces de la fantasía.