5 de noviembre de 2024
Fresca, cristalina y milagrosa, sus aguas aplacaron la sed del caminante desde hace siglos. Cuentan que el Mariscal López y sus tropas llenaron sus caramañolas a su paso por la serranía durante la Guerra Grande. Tupãsy Ykua sigue siendo hoy el refugio del peregrino que llega para refrescarse y empaparse con su mística purificadora.
Tener una imagen de la Virgen de Caacupé de gran tamaño es un sueño de muchos fieles. Una familia de devotos tuvo esta posibilidad, ni bien llegó a la Villa Serrana.