El canal de televisión ABC TV difundió los primeros audios recuperados del celular del supuesto narco Marcos Rojas, alias Marcos Capital, quien fue asesinado en el evento Ja’umína Fest de San Bernardino, en un ataque en el que también murió la influencer Vita Aranda. Las grabaciones revelan la intermediación de miembros del PCC en la trama que desató la tragedia.
La Fiscalía finalmente emitió ayer órdenes de detención contra los “socios de farra” que estaban en el anfiteatro de San Bernardino con el narco asesinado Marcos Rojas. También buscan oficialmente a un sospechoso de ser el sicario que ejecutó el ataque aquel 30 de enero, cuando también murió la influencer Cristina Aranda.
Luego del encarcelamiento de los dos primeros imputados por el atentado en el anfiteatro de San Bernardino, Alcides Villasboa Peralta y Junior Peralta Díaz, la Policía Nacional y el Ministerio Público se concentran ahora en identificar al que entregó al narco Marcos Rojas al sicario que perpetró el sonado ataque en el que también murió la influencer Vita Aranda.
El Ministerio Público imputó ayer al supuesto narco pedrojuanino Alcides Villasboa y a su primo, el policía de Santa Rosa del Aguaray Junior Peralta, por el asesinato del traficante Marcos Rojas y la influencer Vita Aranda, ocurrido en el anfiteatro de San Bernardino. Todos los compañeros del agente fueron remitidos a Asunción.
El fiscal Federico Delfino, que investiga el atentado del pasado domingo 30 de enero en San Bernardino, afirmó este martes que están investigando si la comisaría de Santa Rosa del Aguaray, en San Pedro, funciona como parte de la estructura del PCC en Paraguay o si los policías de esa dependencia tuvieron una actitud “corporativista” con el suboficial Junior Michael Peralta Díaz, uno de los detenidos en el caso.
Fiscales y policías confirmaron que una deuda por 18 kilos de cocaína que contrajo el detenido Alcides Dejesús Villasboa Peralta, alias Ropero, con el fallecido Marcos Ignacio Rojas Mora (29), fue el motivo del ataque en San Bernardino. Policías son sospechosos esconder el arma y teléfonos celulares del policía imputado.