22 de noviembre de 2024
Mientras facinerosos de la política nos roban impunemente o nos avergüenzan por su ignorancia, hay hechos que nos hacen sentir bien, porque demuestran que en el Paraguay aún existen humanidad y solidaridad. Lo prueban los casos de Anita Blaires Capdevila, Adán Acosta y el gran Inchi Brítez.