No solo las naftas y las variedades de diésel se encarecieron tras las paralizaciones y bajas que hubo en 2020. También el gas natural y el gas licuado del petróleo registran incrementos en sus precios internacionales y a nivel local, el segundo producto -que es el que importamos- viene teniendo una tendencia alcista.
La Cámara Paraguaya de Gas aclaró que no se habla de aumento de precios ni de posible desabastecimiento a nivel local, pese a la crisis actual en Bolivia, principal proveedor del producto. Adelantó, sin embargo, que ante los bloqueos a camioneros paraguayos se buscarán otras vías comerciales.
El precio del gas licuado de petróleo aumentó cerca del 5%, se encareció aproximadamente G. 4.000 la garrafa de 10 kilogramos y unos G. 5.000 la de 13 kilogramos, según pudimos constatar esta noche en un recorrido por locales de expendio.
El presidente de Petropar, Eddie Jara, rechazó ayer la denuncia realizada por el vicepresidente de Capagas, Ausberto Ortellado, quien dijo que la venta callejera de gas es peligrosa y violatoria de las normas.
Petropar descarta cualquier incremento que pueda ser trasladado al precio final del gas licuado de petróleo (GLP) que comercializa, tanto en forma directa como a través de terceros aliados. La consulta fue hecha ante el mayor precio que paga la estatal a YPFB desde la última compra directa que realizó a las apuradas, en diciembre, aludiendo “urgencia impostergable”.
La Unión de Gremios de Combustibles y GLP emitió un comunicado en el cual rechazan enérgicamente el proyecto de enmienda constitucional, que califican como una intención de “atentar contra la Carta Magna”.