19 de diciembre de 2024
“¡Basta de jugar con la vida de los pacientes oncológicos!” se leía días atrás en un cartel sostenido por dos mujeres en señal de protesta. Se trataba de un grito ahogado por la cada vez más frecuente falta de medicamentos para tratar el cáncer de mamas en el Instituto Nacional del Cáncer INCAN. Con este escenario se inicia otro Octubre Rosa cuya loable campaña de detección precoz se da de bruces ante la indolencia del Estado que olvida el otro componente para dar pelea a esta enfermedad: el terapéutico.