Indudablemente, el ecosistema “criminal” ha perfeccionado (novedosos) parámetros de “spear phishing”, que se instalan a través de un ejercicio irregular, concordado con el grado de incidencia de aquellos que ostentan una cualidad de ejecutivos dentro de una corporación. En tal efecto, surge el término whaling o “caza de ballenas”, que fuera instalado por The Europol Internet Organised Crime Threat Assessment (2020), en razón a la acción fraudulenta que vulnera correos electrónicos empresariales, enfocándose en los ejecutivos de nivel superior.
El actual paradigma (falaz) reside en el denominado “metaverso”, que ocupa un término experimentado que globaliza las distintas formas de “intercomunicación” dentro del mundo cibernético (universo tridimensional persistente en línea, que une múltiples espacios virtuales). Así, hemos de referenciar nomenclaturas técnicas que entablan justiprecio en el contexto económico financiero, tal como ocurre con los NFT vestibles (tokens no fungibles), que han logrado conquistar el mundo digital, así como la interacción de tecnología blockchain, entre otros vértices en el ciberespacio. Es que, los sujetos que ejecutan un injusto, activan aprovechándose de la descentralización de las plataformas y aplicaciones, y ante el alto nivel en tecnología y finanzas que se promocionan a través de la web.
En los últimos tiempos se fueron intensificando las denuncias de casos de ciberfraudes que delincuentes realizan para robar cuentas electrónicas y datos sensibles de sus víctimas. En esta nota te contamos las tres modalidades más frecuentes, según el área especializada en la Policía Nacional.
Definitivamente, el sector económico-financiero ha determinado una notoriedad de las criptomonedas, sin embargo, con este nuevo suceso (en valores) también se acarrean nuevas precisiones fraudulentas. Es que, en la actualidad se hace referencia al complejo “cryptojacking” bajo una modalidad de “minería” de criptomonedas ilegal.
Entre las diversas pruebas que se sustancian en el tramo de la búsqueda de la verdad en los delitos económicos, se puede apreciar (en mayor medida) la prueba “pericial” económica. Es que dicha diligencia resulta considerable desde una perspectiva especializada, a raíz de los numerosos “informes” y/o “datos” que sirven para descubrir, divulgar y atestar el fraude económico.
ESPAÑA. La Fiscalía de Barcelona ha pedido el archivo de la segunda causa abierta a la cantante colombiana Shakira en España, acusada de defraudar a Hacienda 6,6 millones de euros (unos 7 millones de dólares).