23 de diciembre de 2024
La región de América Latina y el Caribe había sido la más afectada por la pandemia del covid-19. Tras un periodo de recuperación, el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania inyectó presión al proceso de reactivación al que se sumó un nuevo shock, el endurecimiento de las condiciones financieras a nivel global, por ende, el encarecimiento crediticio. Esto, producto de una agresiva política monetaria por parte de los bancos centrales para controlar la ola inflacionaria.